Estrategias prácticas para reducir el gasto escolar en septiembre

04 Sep 2025

Empezar el curso implica el mayor desembolso del año si se tienen hijos. Ropa, zapatos, uniformes si son necesarios, material escolar, empezar a pagar el colegio, primeras cuotas de comedor, extraescolares… septiembre tiene tal desembolso que no sabrás ni por donde empezar.

Según indica la OCU, en muchas casas el gasto por hijo es más alto de 500 € sin incluir los anuales. No es de extrañar que algunas familias opten por pedir un préstamo online para poder cubrir este pico de gasto, del mismo modo que otros lo hacen en Navidad o en vacaciones de verano.

Planificación y previsión: la clave del ahorro

En cualquier caso, endeudarse no debería ser la primera opción. Antes de recurrir a un préstamo conviene conocer una serie de estrategias que ayudan a reducir notablemente la factura de septiembre. Si tienes claro que los números no te salen ni por arte de magia, no pierdas el tiempo y haz tu solicitud ya mismo.

Hacer inventario antes de comprar

A diferencia de lo que muchos creen, el nuevo curso no tiene por qué obligar a estrenarlo todo. Revisar lo que aún está en buen estado puede suponer un ahorro inmediato. Es como abrir la despensa antes de ir al supermercado: seguramente encuentres cosas útiles que eviten un gasto extra.

Adelantarse al mes de septiembre

Quien se organiza y compra en julio o agosto suele encontrar precios más bajos y mayor variedad. Es importante no dejarse tentar por más compras de las necesarias. A veces las súper ofertas salen caras porque no son una necesidad y solo un intento por agarrarse a algo que crees que va a venirte bien.

Ir de compras sin los hijos

Puede parecer un detalle sin importancia, pero dejar a los niños en casa evita caprichos y discusiones en la tienda. Un estuche con dibujos de moda o una mochila de marca puede duplicar el presupuesto. Comprar sin presiones emocionales facilita centrarse en lo esencial.

Apostar por el consumo colaborativo

Cada vez más familias recurren a asociaciones de padres o plataformas de intercambio donde se comparten uniformes, libros y material escolar. Es una práctica que recuerda a cuando los primos heredaban ropa entre sí, con la ventaja de que ahora se organiza de forma más comunitaria y transparente. Además, reduce el impacto ambiental.

Programas de préstamo y bibliotecas

Comprueba si la comunidad autónoma en la que vives tiene planes para prestar libros. Quizá necesites solicitarlos y que te los concedan, pero merece la pena intentarlo. Otra opción es comprobar las ayudas para la financiación de libros de texto y material escolar del Ministerio de Educación.

Tecnología y alimentación, otros frentes de ahorro

El gasto aparece donde menos te lo esperes, así que no descuides dos conceptos: la tecnología y la alimentación. Para que ninguno de los dos te abrume, ten en cuenta estos pequeños consejos antes de lanzarte a comprar aparatos que no son precisamente baratos.

Comprar dispositivos con cabeza

Cuando llega el momento de adquirir una tableta o un portátil, conviene comparar precios entre tiendas físicas y online. Para que te hagas una idea, un mismo modelo puede tener una diferencia de 100 euros según dónde lo compres. Además, en muchos casos, un equipo básico es suficiente para tareas escolares.

Recuperar hábitos saludables en la merienda

El ahorro también puede estar en la lista de la compra. Si tu hijo se lleva al colegio un bocadillo, una pieza de fruta o frutos secos, además de ser mejor para él, no tendrás que comprar procesados típicos de la bollería industrial. Si lo miras por el lado positivo, matarás dos pájaros de un tiro.

Minimizar la carga que supone la vuelta al cole es posible con ideas creativas, previsión y bastante disciplina. Hacer listas, aprovechar la segunda mano, comparar precios y adoptar pequeños hábitos saludables marcan la diferencia. Si a pesar de todo la economía no llega, solicitar un crédito rápidoes tu ayuda puntual perfecta.