¿Notas la reduflación en tus compras navideñas?
Que los precios están por las nubes a causa de la inflación ya lo sabías y que la guerra de Ucrania supuso un antes y un después en tu economía doméstica también. Este acontecimiento causó una subida de precios sin precedentes en casi todo el mundo que el consumidor sigue notando.
La cesta de la compra se duplica y productos que antes eran básicos se han convertido en auténticos bienes de lujo como por ejemplo el aceite de oliva. Para llenar la nevera en estas fechas tan señalas, los créditos online siguen siendo una opción para todo aquel que debe sacar la calculadora para llegar a fin de mes.
La reduflación, una práctica habitual
Según un reciente informe del instituto Ipsos en colaboración con Global Inflation Monitor, un 54% de los españoles dice haber experimentado la reduflación en sus compras. Esta técnica consiste en disminuir el tamaño de los productos y mantener el precio para que el consumidor tenga la falsa sensación de que no han subido.
La reduflación se da principalmente en las bolsas de aperitivos (patatas fritas, cortezas, palomitas… y todo lo que se te ocurra), dulces, arroz, pan, comida precocinada y pasta. Esta estrategia de ofrecer menos cantidad al mismo precio ha hecho que algún supermercado como Carrefour se avergüencen.
El estudio, llevado a cabo entre el 20 de octubre y el 3 de noviembre de 2023, sondeó a 33 países acerca de cómo consideraban que les afectaba la inflación y cómo la veían a medio-largo plazo. Es evidente que el poder adquisitivo de la mayoría de las personas ha bajado, y solo un 23% cree que el año que viene será mejor para sus bolsillos.
Cómo vive la población
El informe valoró el contexto inflacionista en el que se encuentra la población. En el caso concreto de España, se llegó a la conclusión de que un 38% dice que vive bien desde un punto de vista económico. El mismo porcentaje opina, sin embargo, que vive con lo justo, sin lujos, mientras un 23% asegura tener problemas para acabar el mes.
Esta información no ha variado desde el pasado mes de abril de 2022, fecha en la que hizo el primer estudio sobre esto. Pese a todo, la población se muestra optimista y un 23% dice su poder adquisitivo será más elevado el año que viene. El 30% por su parte, no ve el futuro tan alentador y considera que irá a peor.
Los españoles entre los más pesimistas
La población ve bastante lejos el fin de una época inflacionista cuando se les cuestiona sobre cómo ven el futuro. La vuelta a la normalidad parece no llegar nunca, si no que se lo pregunten a ese 71% de españoles que considera que esto seguirá así durante uno o dos años más. En Europa, ese porcentaje baja hasta el 62%.
A España le siguen en pesimismo Suecia con un 81% y Reino Unido con un 78%. De hecho, un 46% de la gente opina que los servicios y los bienes costarán más cada que pase. Solo un 11% cree que bajaran porque las cosas no pueden ir a mejor y se saldrá de esta tendencia inflacionista.
En cuanto a qué es lo que considera que subirá más, un 71% opina que será la cesta de la compra; un 69% cree que se encarecerá más el precio de la energía (gas, gasolina, luz); un 68% es partidario de que lo harán las compras relacionadas con el hogar y un 61% afirma que lo que más subirá será el ocio.
El consumidor no es tonto
Al principio de la inflación, los medios de comunicación ya se hicieron eco de esta moda de reducir cantidades y mantener el precio para poder encajar las subidas lo mejor posible. La reduflación no ha pasado desapercibida para los consumidores, ya que un 46% de ellos lo ha notado en los envasados a nivel mundial.
En el caso concreto de España, son un 54% los consumidores que han detectado que las cantidades son cada vez más pequeñas y se paga el mismo precio que antes. 6 de cada 10 ciudadanos opina que es algo inaceptable, lo que convierte a los españoles en la población más crítica seguida de Francia, Suecia y Países Bajos.
Los productos más afectados por la reduflación o, por lo menos, donde más lo ha notado el consumidor son: los aperitivos (52%), el arroz, el pan y la pasta (39%), los chocolates y dulces en general (37%) y los platos preparados (36%).
Quién es el responsable de la reduflación
Para un 70% de los consumidores solo hay un responsable: el Estado. El 68% considera que los tipos de interés han sido destructivos y un 66% añade a las políticas económicas de cada país.
En el caso concreto de España, un 77% opina que es el estado de la economía mundial el máximo responsable del aumento de precios. Le siguen la subida de tipos de interés (76%), la invasión de Ucrania por parte de Rusia (72%) y las políticas económicas llevadas a cabo en España (61%).
Aún con estos números, España es uno de los países europeos en los que menos se culpabiliza al gobierno de la inflación, al igual que Alemania, Suecia, Hungría y Suiza. Los más críticos con sus gobiernos son Polonia y Reino Unido.